lunes, marzo 06, 2006

Hare Krishna

No se ni como empezar a dar testimonio de la belleza trascendental del Señor Krishna. Toda opulencia se le puede atribuir. He estado volviendo a leer el evangelio de Krishna, conocido como el Bhagavad Gita o la Canción de Dios, esta vez la versión 'tal como es', que incluye comentarios que clarifican y explican las cosas muy bien, y he tomado refugio en los pies de loto de Krishna.

Había leído el Gita hace mas de diez años, y lo había vuelto a leer en varias ocasiones y encontrado solaz, aprendido del amor incondicional y la misericordia sin causa del Señor. El Gita explica en detalle todos los yogas, o métodos de unión con Dios. Explica el yoga de la devoción en el capítulo doce, el del discernimiento que es para los filósofos y gnósticos en el capítulo del jñana yoga, el yoga de la acción o karma yoga en los capítulos tres y cinco que explica como podemos liberarnos de los frutos kármicos de nuestras acciones por medio del sacrificio y ofreciendo a Dios todos nuestros actos como adoración.

El Gita incluye el aspecto místico y de arrebato en adoración en el capítulo once y contiene varios capítulos dedicados a diluscidar la naturaleza de la Divinidad o la Persona Suprema. La versión que estoy leyendo, el 'Bhagavad Gita tal como es', fue traducida e interpretada por Srila Prabhupad, el guru o maestro espiritual de la Sociedad Internacional para la Conciencia Krishna, mejor conocidos como los Hare Krishna. Esta iglesia de Krishna se enfoca mas que nada en el sendero del bhakti, o de la devoción. Ahora estoy entendiendo porque los Hare Krishna estan tan apegados al Gita como la palabra de Dios. Tan solo leer el Gita con fe confiere muchísimas bendiciones.

Krishna es Dios. Todos los nombres y formas de Dios el mismo los asume, y recibe todos los sacrificios y actos de adoración desde todo lugar siempre. No hay otro Dios. En el Gita, el amorosamente nos explica como cada vez que un ser humano adora a la Divinidad, en cualquiera de sus formas o nombres, con sinceridad, el mismo asume ese nombre y forma de la Divinidad por amor a nosotros para llenar todas nuestras necesidades espirituales. También, es Krishna mismo quien desciende de era en era por medio de una encarnación divina, para reinstituir la rectitud.

"Cuandoquiera y dondequiera que haya una declinación en la rectitud, o hijo de Bharata, y un aumento predominante de la irreligión, entonces yo mismo desciendo. Para redimir a los piadosos y aniquilar a los malos, así como para restablecer los principios de la rectitud, yo mismo aparezco era tras era." - Bhagavad Gita 4:7-8

Los Vaisnavas (devotos del Señor Vishnu o Narayana, del cual Krishna es la encarnación) creen que el mismo Krishna encarnó como Rama antes de encarnar como Krishna, luego vino como Buda, y muchos aceptan que Jesús también es un avatar o descenso de Sri Krishna. Además de estas encarnaciones en este planeta, la mayoría de los devotos creen que Krishna encarna periódicamente en millones de planetas para manifestar todas sus opulencias, para renovar la rectitud y destruir la maldad como el mismo promete en el Gita.

A pesar de ser no creado y de ser la persona original, Krishna decidió encarnar hace cinco mil años y vivió en Vrindavan, un pueblito de vaqueros de India. Se casó con Radha, que es la devota perfecta. Krishna era negro, y ella era de tez dorada como el trigo. Cuando encarnó, poseía todas las perfecciones, y era tan increíblemente hermoso y perfecto que todo el que lo veía sabía que era un avatar, un ser celestial, un descenso de la Divinidad. Los pasatiempos de su niñez junto a su hermanito Balarama son conocidos y celebrados por los hindúes en tradiciones coloridas y canciones devocionales extáticas que celebran al niño Dios. Luego, al crecer, fue el auriga de la carroza del guerrero Arjuna, de la casta de los kshatriyas o guerreros, y lo aconsejó en medio de los dos ejércitos en el santo campo de Kurukshetra. Al asumir este rol de consejero, se manifestó como el supremo Gurú o maestro espiritual. Los consejos que Krishna da a Arjuna estan recogidos en los versos santos del Bhagavad Gita, benditas sean sus líneas, y contienen la esencia de todos los Vedas de la tradición hindúa.

En la tradición del movimiento de Conciencia Krishna, se practica el yoga de la devoción como el método mas inmediato y efectivo para desarrollar una relación con Dios. La práctica predominante que se recomienda, promovida originalmente hace quinientos años por el santo Chaitanya Mahaprabhu, es el cántico de los santos nombres de los dos avatares mas queridos en India: Rama y Krishna. El mahamantra que se recita es el siguiente:

Hare Krishna Hare Krishna Krishna Krishna Hare Hare
Hare Rama Hare Rama Rama Rama Hare Hare


Al recitar los nombres de Dios, se disciplina la mente, se desarrolla devoción y amor por Dios, se quema karma, y se permanece por encima de las apariencias del mundo materialista, en un estado de conciencia elevada, de devoción y desprendimiento, y se dedican todos los actos a Krishna como sacrificio, pensando en El y adorándole. Así se va uno purificando y liberando de la ilusión y la ignorancia y de la identificación con el cuerpo, y adquiriendo control sobre los sentidos ya que el cuerpo es como la carroza que guió Krishna para Arjuna, y los sentidos son como los caballos que dirigían la carroza, pero que al tomar refugio en Krishna, Arjuna sublimó sus sentidos porque Krishna fue quien los dirigió y lo ayudó a hacerse maestro de los sentidos. Krishna es el Señor de este cuerpo, y si lo dejamos que dirija nuestra carroza en la batalla de la vida, el nos llevará a la victoria y hacia la liberación final por medio del conocimiento y la práctica de los yogas. Victoria Krishna!

Y menciona el nombre de tu Señor y conságrate totalmente a El. - Qur'an 73:8