sábado, enero 24, 2009

¿Dios ha muerto...

... como dijo Nietzche o todavía está pataleando en la horca? Los científicos dicen que la energía no muere, solo se transforma: creo que la idea de Dios no muere. Dios cambia: a veces tiene muchas caras, a veces tiene una, a veces es una matriarca, a veces un patriarca. Estaba leyendo este artículo sobre sanación espiritual e inadvertidamente encontré esta observación que me resultó sumamente interesante:

Sigmund Freud reduced all religious impulses to biology and sexuality. If you think that sounds strange, just walk into any American shopping mall and you will see, seductively displayed on every shelf, the results of our culture’s wholesale purchase of Freudian biological-sexual atheism. And then realize that the money we use to pay for all this seduction has “In God We Trust” written all over it.

"In God We Trust" - en Dios confiamos. Nuestra moneda ostenta un poder que es el mas sacro de los tabúes: el Gran Poder de Dios. Nuestra moneda nos recuerda que ella es medicina, aché, energía sobrenatural, y que mientras haya gente vamos a tener que realizar transacciones e intercambios de bienes, y vamos a necesitar este poder verde de Dios, poder con el cual se consigue lo bueno y lo malo, lo saludable y lo dañino, la salvación y la perdición. El dios del dinero en que confían algunos americanos es efectivamente un Dios amoral.

No, Dios no ha muerto ni va a morir. El Dios cristiano envejece y cambia. En muchos lugares yace ya moribundo, sus nietos lo han abandonado, muchos se avergüenzan de el, pero este Dios cristiano no es el Dios de los americanos, no es el mismo Dios de las monedas americanas.

Los cristianos fundamentalistas que quieren que impere una relación adúltera entre iglesia y estado en Norte América pierden de perspectiva que el Cristo advirtió: den al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios, hablando específicamente del nombre en la moneda. Cristo también dijo en términos inequívocos que no se puede servir a Dios y al dinero a la vez :)

En ese sentido, poner In God We Trust en la moneda es quizá incluso una transgresión contra el Cristo. No sirve al Dios de Cristo, o al menos nada tiene que ver con el Dios que Cristo imaginó. El Dios que mencionan nuestras monedas es irrelevante al cristianismo.

El Dios en la moneda americana no es el Dios cristiano, ni el Dios de la Biblia. Es Mercurio, el Dios del mercado cuyo nombre incluso comparte raíces semánticas con la palabra mercaderes (como los mercaderes del templo cuyas mesas Jesús tumbó). ¡Si lo que estaban tratando era de avanzar una agenda cristiana, los fundamentalistas cristianos erraron al querer meter a Dios en la moneda americana, y erraron en mayúscula! El poder en esta era ha sido dado a Mercurio, que es el Dios de la comunicación, el mas poderoso Dios de nuestros tiempos, el que ha facilitado la globalización y el internet, lo cual asegura que su hegemonía nunca va a subsidir.

Su nombre griego es Hermes, y de hecho desde que los masones lograron avanzar la independencia de América e ingeniar los símbolos en las monedas, las enseñanzas herméticas han avanzado enormemente en el mundo, sobre todo en las Américas. Lo que hoy se llama New Age, o Nuevo Pensamiento, las enseñanzas de Conny Mendez, de Elizabeth Claire Prophet, el evangelio cristiano de la prosperidad, the Secret, eso es todo hermeticismo reciclado.

Me he dado cuenta de que, mientras el cristianismo va decayendo a creces y las iglesias cristianas se van vaciando y la gente dejando de creer al estilo de los antiguos, nuevas iglesias ... no, mejor dicho, MEGA iglesias están siendo construídas, como el templo Agape en California que se basa en las enseñanzas del bestseller The Secret, una doctrina basada en el mentalismo (el principio de que todo es mente). El mentalismo es el primero de los siete principios herméticos.

Oprah, la célebre facilitadora de shows de pláticas, ha dado su estampa de apoyo a esta enseñanza y la ha popularizado, en efecto renovando la cultura (porque Oprah es la nueva Midas, todo lo que Oprah toca se vuelve de oro).

Estas iglesias tienen un énfasis en un evangelio de la prosperidad que, para muchos en estos tiempos de crisis financiera, parecería ser un espejismo en el desierto. La era en que estamos la rige el dinero, el nuevo orden de los tiempos (como anuncia el dólar americano: novo ordo secloris) es gobernado por el dinero. Hoy, el dinero tiene hasta su propio evangelio, su propia doctrina.

Digo todo esto, y parecería un juicio valorativo. No lo es. Creo que es bueno que Mercurio tenga poder en una cultura siempre que sea temperado por otros poderes, y les voy a explicar porqué.

Cuando la ascendencia y popularidad de Mercurio sucedió entre los griegos en la antigüedad, la siquis colectiva marcó ese evento con el mito de como Hermes se robó el ganado de Apolo. El ganado siempre ha sido símbolo de afluencia y poder, y Apolo representa el viejo orden de los olímpicos. Cuando Mercurio ascendió en importancia en la cultura griega antigua, esto coincidió con la ascendencia de una nueva clase media compuesta por comerciantes. Muchos de ellos se lucraron de la ruta de seda, intercambiando bienes con los orientales. Otros intercambiaron con los fenícios.

Las hermas, o piedras sagradas del Dios Hermes, se situaban en las fronteras, en las áreas limítrofes entre las ciudades, pueblos y hogares de familia, que eran lugares que se prestaban para el intercambio de bienes. Con el tiempo, estos lugares limítrofes entre las ciudades se convirtieron en centros que atrayeron mas y mas mercaderes, convirtiéndose en los centros comerciales de la antigüedad. Fue así como tanto en Grecia como en Africa el Dios de las fronteras se vino a convertir en el Dios del comercio (Hermes, o Eleguá).

Todavía hoy en la santería Eleguá se representa como una piedra, conocida como yangi, que es comparable a la herma del Hermes griego. La persistencia de paralelos a través de tantas culturas antiguas tan distintas y lejanas como la hindúa, yoruba y griega, representa un nivel de realidad en el inconciente colectivo de la humanidad que es innegable: este Dios es tan real como la historia sicológica y los impulsos instintivos de la siquis de nuestra raza.

Esta ascendencia antigua de Hermes fue auspiciosa porque el intercambio comercial funciona como un incentivo contra las hostilidades y guerras entre los pueblos y aumenta la prosperidad de todos: así, el mucho intercambio comercial beneficia a todos y les trae prosperidad y paz.

Este es uno de los principios bajo el cual opera el mandamiento hindú del ahimsa, o la no-violencia (transferido a la Biblia como 'no matarás', pero mucho mas amplio que eso). La idea es que en lugar de hacernos daño mutuo, nos hagamos beneficio mutuo, que nuestro encuentro en las zonas limítrofes sea auspicioso y una ocasión de celebración y amistad. Ese es uno de los dones de Mercurio, y en ese sentido su ascendencia fue un avance con respecto a la era que lo precedió.

Del mismo modo, la ascendencia de Mercurio en la modernidad coincide con la era industrial, antes de la cual el clero cristiano y los reyes medievales europeos dominaron la Tierra sin que su poder fuera balanceado, manteniendo a los paisanos en la ignorancia y en la mugre y llegando a unos niveles de explotación económica vulgares que incluyeron la esclavitud del negro y el genocidio del indígena para robarle el oro.

El comercio engorda a la clase media. Cuando los comerciantes se convirtieron en una poderosa clase media, comenzó a haber un balance de poder que benefició a los pobres y terminó negando la hegemonía de la superstición (iglesia) y del poder (estado). El poder tenía que ser puesto al servicio de los hombres, y no al revés. En esto consistieron la revolución francesa y la independencia americana, marcas en la historia de este traspaso de poder.

Aquí hay que admitir que la sombra de Hermes (porque todo Dios tiene una posible sombra) es la posibilidad de la avaricia de los mercaderes, cuya fea cara mostró Wall Street en Octubre del 2008 y desde entonces hemos visto lo peor de los excesos de los mercaderes americanos. Los funcionarios de Mercurio pueden a veces cegarse cuando quieren acaparar mas riqueza de la que merecen y necesitan, robándole a los pobres o realizando transacciones de carácter dudoso.

Los devotos de Hermes, Eleguá, Ganesha y todas las manifestaciones culturales de este Dios, siempre notaron al unísono que este Dios tiene dos caras y que es impredecible. No necesariamente hace lo mas moral, sino que a veces hace lo mas provechoso porque su lema es la Oportunidad, es un Dios listo que usa la inteligencia para lograr lo que quiere.

Para ilustrar la naturaleza del Dios del dinero, que sobrevive por el uso de su inteligencia, cabe compartir un mito de como Ganesha le ganó a su hermano Skanda en una competencia:

Se dice que cuando llegaron a la pubertad, Shiva y Parvati, los padres de Ganesha y Skanda, organizaron una competencia entre los dos hermanos para ver quien iba a poder dar la vuelta al mundo en menos tiempo: quien llegara primero iba a poder ser el primero en casarse.

Cabe explicar que el astuto Dios del éxito y dinero Ganesha es un Dios pipón, gordo, mientras que su hermano Skanda es el Generalísimo del Ejército Divino y su estado físico es atlético. Por eso la historia es muy cómica y los hindúes consideran todo lo que tiene que ver con Ganesha como uno de los mas alegres lilas o pasatiempos de Dios.

Inmediatamente cuando sonó la trompeta, Skanda se montó en su vehículo Myol, que es un pavo real, y empezó a volar al este alrededor del mundo. Pasaron los días. Luego, pasaron las semanas y finalmente del oeste apareció el glorioso soldado Skanda, cansado pero ennoblecido.

Al llegar, descubrió que ya Ganesha se había casado ... y que tenía dos esposas. Resulta que Ganesha había dado una vuelta alrededor de sus padres, Shiva y Parvati, y al final se postró ante ellos y les explicó que debido a que ellos eran el Padre y Madre de todo este universo, dar la vuelta alrededor de ellos era el equivalente a darle la vuelta al mundo. Conmovidos, sus padres no tuvieron mas opción que otorgarle la victoria en la competencia y celebrar sus bodas.

Skanda quedó tan furioso que se retiró a su retiro en el monte Merú donde hasta hoy no se ha casado y, según algunos, es el patrono de los homosexuales.
El mito tiene algo de resonancia con la historia de como Mercurio le robó el ganado a su hermano Apolo por medio del uso de sus encantos y astucia.

El Dios del dinero no es malo, lo que pasa es que es listo y sabe usar la labia y conseguir el éxito en todo lo que emprende. Por eso en todas estas tradiciones siempre se le invoca primero en todos los rituales.

El dinero es, para bien o para mal, absolutamente necesario en la vida de los seres humanos y ha sido una fuerza civilizadora en el sentido de que antes de que Mercurio ganara el poder, los mas fuertes tuvieron el poder. Es decir, antes de la era de los mercaderes, existieron unos abusos de poder que se valieron con frecuencia de la brutalidad y la ignorancia. El Dios del dinero obliga a todos a volverse inteligentes y nos enseña a todos las cosas que tenemos que hacer para asegurar nuestra supervivencia. El astuto Dios del dinero y del comercio ha sido uno de los poderes que mas ha contribuído al éxito de la raza humana.

Al estudiar los mitos asociados con el Dios del dinero podemos entender mejor las dinámicas que se dan cuando este Dios ostenta el poder, como sucede en la era presente. Se dice que la era industrial está siendo remplazada por la era de la informática, lo cual no cambia mucho las cosas porque Mercurio es también el mensajero de los Dioses y el Dios de la comunicación, entonces su poder solo va a aumentar en los próximos siglos.

Dios no ha muerto. Lo que hizo fue mudar su templo al mercado.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Dios no muere....porque nunca estuvo vivo. Lo demas es producto de la inagotable imaginacion y poesia humana.