sábado, diciembre 22, 2007

Somos lo que comemos

Acabo de retornar de una visita a Puerto Rico ... recibí muchas impresiones.

La mas bonita fue la gente. Allí la gente es echada para atrás, relajada e informal. Eso explica mucho de mi manera de ser (porque allí me criaron). Siempre he sido así y siempre quiero seguir siéndolo.

Sin embargo noté un problema muy serio y crónico en Puerto Rico y su cultura: los hábitos alimentícios de los puertorriqueños son horrendos. Mi hermana es una: come una dieta rica en carnes fritas, casi sin fibra, lo cual no es conducivo a una buena digestión de toda esa comida pues es la fibra la que ayuda a que pasen por el estómago sus contenidos.

Muchas personas en mi familia tienen problemas digestivos. Algunos están mórbidamente obesos. Algunos se han hecho y otros han considerado hacerse la operación para empequeñecer el estómago. Hay personas en mi familia con problemas de diabetes y cardíacos que tienen dietas sumamente restringidas. Mi propia madre padece de divertículos y le está prohibido comer carne roja, comida grasosa, y otros productos. Está claro que los hábitos alimentícios de mi gente los están matando y haciendo sufrir.

Mi decisión de evitar comer carne no es solo revolucionaria, sino oportuna e imperativa, en vista de los problemas que ha causado el consumo constante de carne y las dietas con poca fibra que son comunes en mi familia. Crecí comiendo bistec encebollado, chuletas fritas, pollo frito y fricasé de res a diario: era inconcebible una comida sin un plato de carne, se me enseñó y programó que eso era un plato incompleto. El vegetarianismo no estaba el en horizonte de nuestro estilo de vida, de hecho era inconcebible, sin embargo toda dieta (sea o no vegetariana) que sea bien planificada y variada, funciona.

Aproveché la oportunidad mientras estuve allí para introducir a mi madre al mundo de los productos de tofú y soya, como la leche de soya (ya que tampoco puede consumir productos lácteos), y para enseñarle un nuevo modo de cocinar la yuca sin grasa (ya que tiene que evitar la grasa) haciendo pan de casabe en lugar de yuca frita.

Una de mis primas consideró seriamente 'clipearse el estómago', que es una operación costosísima, dolorosísima, que dura cuatro horas y que toma meses en recuperarse, incluyendo las primeras semanas donde solo puede tomar líquidos y solo onzas a la vez. Luego de que le presentaran con los datos sobre los posibles efectos secundarios de la operación, sintió miedo y decidió no hacerlo. En lugar se puso a dieta y perdió casi cincuenta libras (aunque todavía está muy obesa, pero mas saludable). Lo hizo por su salud.

Otra prima mía mórbidamente obesa tiene una actitud distinta: es gorda y no le importa. Si muere mañana por causa de complicaciones de salud, al menos disfrutó de su corta vida. Admiro su actitud, pero reconozco que es peligrosa. Fue gracias a esa actitud que mi tía murió de diabetes. Todos tenemos que morir, pero es gracias a esa actitud que la calidad de vida de gran parte de mi familia es pobre: operaciones de corazón abierto en pacientes que toda su vida han cocinado todo con tocino y que comen lechón semanalmente, dietas sumamente restringidas como la de mi madre que apenas llenan los nutrientes necesarios pero que, si no se siguen, ponen la vida y la salud en peligro.

Hay un adagio pagano de la antigüedad que dice: nada en exceso. Se puede comer, incluso se pueden comer platos inusuales durante las Navidades, ricos en grasa, el coquito, el lechoncito, siempre y cuando esto sea la excepción y no la regla. Todo tiene su medida, su lugar, y su espacio. Hacer papas majadas junto a un veggie burger es mucho mas saludables que hacerlas fritas.

Comer papas naturales, picadas y hechas en casa, en lugar de las papas de McDonalds es obviamente mas natural y sano. En la película Biggie Size Me (la cual recomiendo) fueron sujetas las papas fritas de McDonalds a un experimento junto a papas de otros restaurantes a ver que sucedía con el paso del tiempo. Mientras que todas las otras papas duraron alrededor de una semana antes de que el hongo y bacterias se las comieran, las de McDonalds no se pudrieron: algún químico contra natura tendrán añadido que no pasan por el proceso natural y normal de descomposición: es eso lo que se come el que visita a McDonalds. Estas comidas modificadas son llamadas 'frankenfoods' (por el monstruo de Frankenstein) por los activistas pro consumidor. Está claro que gran parte de la comida rápida que se consume en las grandes cadenas de restaurantes consiste de frankenfoods: ha sido modificada de un modo no natural sin tomar en consideración los efectos que esa comida ha de tener en el que la consume.

En la película Biggie Size Me, un hombre no come otra cosa que McDonalds por un mes entero a modo de experimento. En varias ocasiones durante el mes tuvo que ir de emergencia al doctor. La primera de estas ocasiones fue solo tres días luego de comenzar su dieta de McDonalds. En al menos una ocasión simplemente tuvo que vomitar. Su cuerpo, aunque recibía comida, no recibía los nutrientes que necesitaba, y cayó en shock. Es por eso que solo par de horas luego de comer en McDonalds, volvemos a tener hambre: el cuerpo no se ha nutrido en realidad.

Dejar la carne, poco a poco, no es tan difícil, además suele ser excitante aprender recetas nuevas y nuevos modos de hacer los platos favoritos con ingredientes mas saludables. Esto puede ser tratado como un tipo de aventura culinaria, como mi experimento hace varios meses atrás con los varios tipos de veggie burgers en el mercado (luego del cual decidí que el BocaBurger era el de mejor calidad).

Mi última aventura: compré un libro de recetas rastafarianas. Si, la religión jamaiquina tiene unas leyes de dieta ital (vital) que se derivan de la Biblia, y que es algo parecida a la dieta de los Hare Krishna porque es vegetariana y completamente natural. Pero los ingredientes son los mas comunes en las islas: frutas como la guayaba, la banana, adornan sus páginas, y raíces como el ñame y la yuca. Se usa con frecuencia el aceite de coco y la pulpa del coco. También muestra usos innovadores para el maní, las lentejas y otros ingredientes.

Mi consejo: un poco de disciplina, creatividad y planificar la dieta puede alargar la vida y aumentar considerablemente la calidad de vida de la persona.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

hola como estas soy Anita, me parece muy bien que quieras iniciarte en la comida vegetariana, es muy saludable. Además la mayoría de las veces la carne hace que las personas se vuelvan malhumoradas. Pero saliendonos del tema me atrajo de la pagina la preferencia por la cultura hindu y me gustaria recomendarte una pelicula parecida a la historia de Krishna y Radha se llama "Devdas". Luego me gustaria preguntarte algunas cosas sobre ellos dos, solo dudas que no le hago ahora porque me da pena la ignorancia mia. gracias por todo

Hiram dijo...

Me puedes enviar un email, si quieres privado, a twospiritsaadaya@hotmail.com. No tienes porque sentir pena porque la mayor parte de la gente no sabe casi nada de ellos, y además a los devotos de Krishna nos encanta compartir estas cosas con las almas que inquieren. No sabes la buena fortuna que es escuchar ni siquiera el santo nombre de Krishna, mas aún poder inquirir a un devoto sobre el: eso siempre es el resultado de buen karma.

Buscaré esa película. En cuanto a Krishna y Radha ... néctar puro. Radha es la encarnación misma de la dulzura, ternura y devoción.